Desarrollo de personajes: made in Gotham.

Casi cuatro semanas han pasado desde que Gotham hizo un segundo regreso en lo que va de su temporada; a veces se les va un poco la mano con las pausas en la emisión, en especial cuando uno ve que su anterior retorno a principios de año fue para emitir únicamente un par de capítulos. Algo desubicado a primera vista, pero que desde un punto de vista argumental y de marketing fue totalmente justificado.

*A partir de aquí puede que haya algún que otro spoiler leve sobre la serie*

No puedo negar que el hecho de que el mini arco de Jerome haya sido emitido casi en solitario del resto de la serie ayudó en gran medida para que adquiriera una relevancia aún mayor. Algo que definitivamente se hubiera diluido considerablemente de haber continuado con el progreso normal de la serie sin interrupciones.

A todo esto, aquello no es el motivo de esta entrada, sino más bien una ligera ambientación, ya que el verdadero protagonista en esta ocasión es quien se robara todas las miradas en las últimas entregas de Gotham: Edward Nigma.

"The Riddler is coming."
(Si tengo que verla con los subs en inglés porque
en español se demoran bastante, una pena.)

Si algo no le falta a esta producción de Warner son personajes disponibles para adaptar a la pantalla chica, en especial los villanos, por lo que no es de extrañar que a cada uno se les de un tratamiento diferente. Fue precisamente el caso de Edward lo que podría considerarse uno de los mejores desarrollos en lo que va de la serie.

Les tomó poco menos de tres años en el aire para hacer que el forense del GCPD fuera consciente de su verdadera identidad luego de un largo viaje de descubrimiento personal, uno que comenzó hace tiempo cuando todavía era el bicho raro de la policía y que sufría el bullying por parte de los oficiales.

"Buenas noches señor, ¿necesita ser secuestrado?"

¿Qué es tan especial en la evolución de Ed? Prácticamente que a diferencia del resto del reparto su crecimiento ha sido tratado de manera progresiva, casi sin cambios abruptos en su narración, salvo en momentos bien puntuales. Su posición privilegiada dentro de la estructura de Gotham fue de gran ayuda para conseguir esto, algo que sin duda no han contado otros referentes.

La mayoría de los actuales villanos hicieron un recorrido mucho más corto para convertirse en tales (Barbara, Oswald), otros tuvieron apenas uno o dos capítulos antes de caer en el sendero del mal (Firefly, Fries), mientras que un tercer grupo ya desde su primera aparición cumplían ese rol (Falcone, Jerome y todos los antagonistas principales de temporada).

Nygma por su lado, formaba parte de la última partida, aquellos cuyo destino es ser antagonistas pero que aún no se han revelado como tales (actualmente solo Ivy y Selina pertenecen a este exclusivo grupo).

Recorrió un largo y bastante variado camino. Algunas veces en solitario, y por momentos estuvo acompañado. Experimentó el amor, la amistad, también supo lo que fue el dolor por la partida de un ser querido, y el sabor amargo de la traición. Conoció a su mentor e incluso tuvo un esporádico rival que terminaría por ayudarle a dilucidar su verdadero ser: saber quién era en verdad Edward Nygma, y cómo ser él.

Si los muelles de Gotham hablaran...

Miren esa expresión, es la felicidad en persona.
¿Quién podría decir que es un demente?